1. Preparar el puré de manzana :Primero, prepara tu puré de manzana casero según tu receta preferida. Asegúrese de que el puré de manzana se haya enfriado por completo antes de congelarlo.
2. Elija contenedores aptos para el congelador :Seleccione recipientes aptos para el congelador para guardar el puré de manzana. Los recipientes de plástico para congelar o las bolsas para congelar son opciones adecuadas.
3. Porción de puré de manzana :Distribuya la compota de manzana en los recipientes. Deje aproximadamente una pulgada (2,54 cm) de espacio libre en la parte superior de cada recipiente para permitir la expansión durante la congelación.
4. Contenedores de etiquetas :Etiquete los contenedores con el contenido y la fecha. Esto le ayudará a realizar un seguimiento de la frescura de la compota de manzana.
5. Congelar rápidamente :Coloque los recipientes de puré de manzana en el congelador lo antes posible. Congelar el puré de manzana rápidamente ayuda a mantener su calidad y textura.
6. Duración del almacenamiento :La compota de manzana casera adecuadamente congelada puede durar hasta 6 meses.
7. Descongelar antes de usar :Cuando estés listo para usar el puré de manzana congelado, saca la cantidad deseada del congelador y déjalo descongelar en el refrigerador durante la noche o a temperatura ambiente durante unas horas.
Recuerde no volver a congelar el puré de manzana descongelado, ya que puede comprometer la calidad y seguridad de los alimentos.
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