Ingredientes y herramientas:
- huevos frescos
- Olla o cacerola grande
- Cuchara ranurada
- Baño de hielo (un recipiente grande lleno de hielo y agua fría)
Instrucciones:
1. Coloque los huevos en una olla:
- Comienza colocando los huevos frescos en una olla o cacerola grande. Coloca los huevos en una sola capa, asegurándote de que no se toquen entre sí.
2. Agregue agua fría:
- Llene la olla con suficiente agua fría para cubrir completamente los huevos aproximadamente una pulgada. El agua fría ayuda a evitar que los huevos se rompan durante el proceso de ebullición.
3. Llevar a ebullición suave:
- Coloca la olla en la estufa a fuego medio-alto. Lleva el agua a ebullición suave. Verás que se forman pequeñas burbujas alrededor de los bordes de la olla.
4. Reduzca el fuego y cubra:
- Una vez que el agua hierva, reduce inmediatamente el fuego a medio-bajo. Revuelve suavemente los huevos con una espumadera para evitar que se peguen al fondo de la olla. Cubre la olla con una tapa.
5. Hervir durante 10 a 12 minutos:
- Configure el cronómetro en 10 minutos para huevos pasados por agua con yemas líquidas o en 12 minutos para huevos duros con yemas firmes. El tiempo de ebullición puede variar según la altitud de su región y el tamaño de sus huevos.
6. Transfiera a un baño de hielo:
- Después del tiempo de ebullición, use la espumadera para transferir con cuidado los huevos directamente del agua hirviendo al baño de hielo preparado. Déjalos en el baño de hielo durante al menos 5 minutos para detener el proceso de cocción y enfriarlos rápidamente.
7. Pelar huevos:
- Una vez que los huevos estén fríos, golpéelos suavemente sobre una superficie dura para romper la cáscara. Luego, pela los huevos con agua fría. Comenzando por el extremo ancho del huevo, la cáscara debe desprenderse fácilmente.
Consejos para huevos fáciles de pelar:
1. Utilice huevos más viejos:
Los huevos recién puestos tienen membranas más fuertes, lo que los hace más difíciles de pelar. Utilice huevos que tengan al menos una semana para pelarlos más fácilmente.
2. Truco de los refrescos:
Agrega 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio al agua antes de hervir los huevos. Esta solución alcalina ayuda a aflojar la membrana, facilitando el pelado.
3. Método de rodadura:
Después de hervir y enfriar los huevos, gírelos suavemente entre las palmas de las manos sobre una superficie plana para romper las cáscaras de manera más uniforme.
4. Refrigeración:
Guarde los huevos duros en el refrigerador en un recipiente hermético. Se mantendrán bien hasta por una semana.
Con estas sencillas técnicas podrás disfrutar de huevos perfectamente duros y que se pelan sin esfuerzo, lo que los hace ideales para desayunos, ensaladas, meriendas y recetas variadas.
Source:https://hogar.98905.com/plants-flowers-herbs/growing-berries/1008135386.html