1.Reúna sus suministros:
- vinagre blanco
- Bicarbonato
- Un recipiente apto para lavavajillas
- Una esponja o paño de cocina
2.Prepara el lavavajillas:
- Retire cualquier vajilla o utensilio del lavavajillas.
- Coloque un recipiente apto para lavavajillas lleno de vinagre blanco en la rejilla superior del lavavajillas.
- Cierra el lavavajillas y ejecuta un ciclo regular sin detergente ni vajilla en su interior.
3.Añadir bicarbonato de sodio:
- Una vez finalizado el ciclo, abre el lavavajillas y espolvorea una taza de bicarbonato de sodio sobre el fondo del lavavajillas.
4.Ejecute otro ciclo:
- Cierra el lavavajillas y ejecuta un ciclo corto de agua caliente sin detergente ni vajilla en su interior. Esto ayudará a disolver el bicarbonato de sodio y eliminar la suciedad y la mugre restantes.
5.Limpie el interior del lavavajillas:
- Una vez finalizado el ciclo, utilice una esponja o un paño de cocina humedecido con vinagre blanco para limpiar el interior del lavavajillas, incluida la puerta y alrededor de los chorros de agua.
6.Enjuague el lavavajillas:
- Enjuague el lavavajillas con un ciclo final utilizando únicamente agua caliente, para eliminar los restos de vinagre o bicarbonato de sodio.
7.Secar el lavavajillas al aire:
- Deje la puerta del lavavajillas abierta un rato para permitir que el interior se seque al aire y evitar olores desagradables.
Si sigue estos pasos, podrá limpiar su lavavajillas de forma eficaz y natural utilizando vinagre y bicarbonato de sodio, ahorrándole dinero en productos de limpieza químicos agresivos. Una limpieza regular ayudará a mantener su lavavajillas en buenas condiciones y evitará olores desagradables.
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