1. Desconecta la corriente :Apague el suministro eléctrico de la lámpara y del área en la que trabajará. Esto garantiza su seguridad al manipular cables eléctricos.
2. Identificar los puntos de conexión :Ubique los cables en sus sensores de movimiento y artefactos de iluminación que se usan para las conexiones neutral, caliente y de tierra. Estos cables suelen estar codificados por colores, pero siempre es una buena idea verificarlos con un multímetro.
3. Conecte los cables neutros :Conecte los cables neutros (generalmente blancos) de ambos sensores de movimiento al cable neutro del artefacto de iluminación. Retuerza los cables y asegure la conexión con una tuerca para cables.
4. Conecte los cables calientes :Conecte los cables calientes (generalmente negros) de ambos sensores de movimiento al cable caliente de la lámpara. Nuevamente, retuerza los cables y asegúrelos con una tuerca para cables.
5. Conecte los cables de tierra :Finalmente, conecte los cables de tierra (generalmente verdes o de cobre desnudo) de ambos sensores de movimiento al cable de tierra del artefacto de iluminación y asegure la conexión con una tuerca para cables.
6. Prueba la configuración :Una vez que todas las conexiones estén seguras, encienda la alimentación y pruebe los sensores de movimiento. Asegúrese de que la luz se encienda cuando cualquiera de los sensores de movimiento detecte movimiento.
6. Ajustar la sensibilidad (opcional) :Si los sensores de movimiento son demasiado sensibles o no lo suficientemente sensibles, es posible que deba ajustar su configuración. Por lo general, hay un pequeño dial o perilla en los sensores de movimiento para ajustar la sensibilidad.
Si sigue estos pasos, podrá conectar con éxito dos sensores de movimiento a una sola lámpara, lo que permitirá mayor comodidad y un mejor control de la iluminación en su espacio.
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