1. Aspire bien el piso con un accesorio de cerdas suaves para eliminar la suciedad, el polvo o los residuos. Esto ayudará a evitar que el rasguño empeore.
2. Aplique un limpiador para pisos laminados al rayón y púlelo con un paño suave. Esto ayudará a limpiar el rasguño y eliminar la suciedad o los residuos adheridos.
3. Utilice una goma de borrar suave para frotar suavemente el rayón. Tenga cuidado de no frotar demasiado fuerte, ya que esto podría dañar el suelo laminado.
4. Aplique un producto para laminación al rayón y púlelo con un paño suave. Esto ayudará a rellenar el rayón y hacerlo menos visible.
5. Si el rasguño aún es visible, puede intentar usar una masilla para madera para rellenarlo. Asegúrese de elegir una masilla para madera que sea similar al color de su piso laminado.
6. Una vez que la masilla para madera se haya secado, lije hasta que quede suave.
7. Aplique un limpiador para pisos laminados y púlelo con un paño suave.
Si ninguna de estas soluciones funciona, es posible que deba reemplazar la sección dañada del piso laminado.
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