- Florero de cristal
- Medio de cultivo hidropónico (como guijarros Leca, rocas de lava o fibra de coco)
- Agua destilada o filtrada
- Plantas suculentas
- Tijeras o tijeras de podar
Instrucciones
1. Elige un jarrón de cristal. El jarrón debe ser lo suficientemente grande para acomodar las raíces de sus plantas suculentas, pero no tan grande como para que las raíces tengan demasiado espacio para extenderse.
2. Añade el sustrato de cultivo hidropónico al jarrón. Llene el jarrón aproximadamente 1/3 de su capacidad con el medio de cultivo.
3. Riega el medio de cultivo. Agrega suficiente agua al jarrón para que el medio de cultivo esté húmedo pero no empapado.
4. Elige plantas suculentas. Las suculentas son plantas que se adaptan a condiciones secas, lo que las hace ideales para la jardinería hidropónica. Algunas buenas opciones para suculentas hidropónicas incluyen echeveria, sedum y sempervivum.
5. Elimine las raíces muertas o dañadas de las plantas suculentas.
6. Planta las plantas suculentas en el jarrón. Coloque con cuidado las plantas suculentas en el jarrón, espaciándolas uniformemente.
7. Riegue las plantas. Agregue suficiente agua al jarrón para que el nivel del agua esté aproximadamente 1 pulgada por debajo del fondo de las plantas.
8. Coloca el jarrón en un lugar soleado. Las suculentas necesitan mucha luz solar para prosperar.
9. Fertilice las plantas cada pocos meses. Utilice un fertilizante soluble en agua que esté específicamente formulado para plantas hidropónicas.
Consejos
- Si el nivel de agua en el jarrón baja demasiado, agregue más agua destilada o filtrada.
- Si el agua del jarrón se vuelve turbia, puede que sea el momento de cambiar el agua.
- Las suculentas son susceptibles a la pudrición de las raíces, por lo que es importante asegurarse de que las raíces no estén sumergidas en el agua.
- Si vives en un clima húmedo, es posible que desees rociar tus suculentas de vez en cuando.
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