- Arena seca.
- Espuma en spray expansible.
- Periódicos viejos.
- Trapos viejos.
- Guantes desechables.
- Gafas de protección.
- Máscara antipolvo.
- Un par de pinceles:uno para la capa inicial y otro para el toque final.
- Pintura acrílica en varios colores (tonos de gris, verde oscuro, marrón).
Pasos
1. Prepare el espacio de trabajo
- Elige una zona exterior para trabajar porque el proceso puede resultar complicado.
- Preparar la zona para pulverizar la espuma. Puede hacerlo esparciendo periódicos viejos y trapos sobre la superficie de trabajo. Use su equipo de protección (guantes, gafas protectoras, mascarilla antipolvo), especialmente al manipular la espuma.
2. Construya una base sólida
- Toma puñados de arena seca y comienza a apilarla según el tamaño y el diseño de tu roca. La arena amontonada no debe ser demasiado pequeña; de lo contrario, será inestable. Use sus manos o una pala pequeña para darle forma y alisar la arena hasta darle la forma de roca deseada.
3. Rocíe la espuma expansiva
- Agite bien el bote de espuma en aerosol y comience a cubrir la forma de su roca, de arriba hacia abajo, con una capa de espuma en aerosol. Esta es la "primera capa de espuma".
- Asegúrese de seguir las instrucciones del bote de espuma en aerosol para un uso y aplicación adecuados. No rocíes muy poco porque la espuma se pegará a la arena y no a sí misma, y toda la roca se desmoronará demasiado.
- Tampoco te excedas al rociar la primera capa, ya que cuanta más espuma rocíes, más pequeña/aplastada se volverá la roca. Simplemente rocíe una capa fina.
- Dejar que la espuma se expanda - duplicará su volumen.
- Mientras la espuma pulverizada se expande, rocíela suavemente con agua para que siga expandiéndose aún más.
4. Crea texturas y grietas
- Rocía la parte superior de la espuma con agua para que no se caliente demasiado al tocarla.
- Empezar a romper la espuma con la mano. Utilice sus dedos para hacer fisuras y grietas en la espuma húmeda.
- Para una apariencia más rugosa y áspera, comience a rasgar tiras de espuma.
- No te olvides de los lados de tu roca de espuma:sigue dándole forma y creando grietas con las manos. Siéntete libre de utilizar un poco de periódico viejo para rasgar suavemente la espuma en varios lugares.
5. Aplicar la segunda capa de espuma.
- Una vez que estés satisfecho con la textura de la espuma agrietada, espera a que se seque.
- Pulverizar una segunda capa de espuma sobre toda la roca. No uses demasiada espuma. El objetivo es llenar los huecos de la primera capa.
6. Talla tus rocas (opcional)
- Una vez seca la segunda capa, puedes empezar a tallar la espuma con un cúter afilado o un cúter para darle a tu roca una forma más natural e irregular.
7. Pinta y termina tus rocas (opcional)
- Una vez que la roca esté completamente seca (después de 24-48 horas), píntalas o termínalas según tu preferencia.
- Pinta para que se parezca a las piedras que te gustaría que se vieran. No sienta que tiene que limitarse a los grises y marrones. Siéntete libre de experimentar agregando algunos tonos más oscuros o más brillantes.
- Pinte algunos puntos que se parezcan a parches de musgo.
- Dejar secar completamente la pintura.
- Para darle a tus rocas un aspecto "húmedo", puedes rociarlas con una pintura en aerosol transparente semibrillante.
- Tus rocas artificiales están listas para ser utilizadas en tu jardín o dentro de la casa.
Source:https://hogar.98905.com/home-repair-maintenance/painting/1008136262.html